En junio de 2014 participé por primera vez del Curso Internacional de Ilustración y Diseño Gráfico, organizado por la Fundación Santa María en Albarracín, un pequeño y hermoso pueblo medieval de Aragón, España. La dirección estuvo a cargo de Isidro Ferrer y Carlos Grassa.
Me encontré con gente de todas partes del mundo. No conocía a nadie, pero hablábamos todos el mismo idioma… el español, pero también el del diseño y la ilustración.
Durante el taller coordinado por la tipógrafa Laura Meseguer, desarrollamos un alfabeto experimental bajo la consigna “Sí, no, tal vez”. Las letras se agruparon por afinidades formales, no fonéticas, y así nació Ambigua, una tipografía basada en la idea de ambivalencia: una letra puede ser otra, según cómo se mire.
Tres días de trabajo intenso.
Una experiencia breve, luminosa… y reveladora.